La educación es uno de los derechos humanos más importantes dentro de la sociedad, es a partir del acceso a la educación que las personas y las sociedades progresan. La educación, además de ser fuente de conocimientos y aprendizajes, se ha convertido en el medio a través del cual se construyen ciudadanos con valores y cultura.
La sociedad y la educación son dos conceptos que se complementan y relacionan en la medida en que la educación aporta en el crecimiento y desarrollo de la sociedad y ésta, a su vez, contribuye en la formación de las personas, es decir que, sin una buena educación, no podremos construir buenas y mejores sociedades.
La educación resulta necesaria en todos los sentidos y escenarios sociales, pues se constituye como un factor clave para lograr mejores niveles de bienestar social y crecimiento económico, de igual forma aporta en la reducción de desigualdades, promoviendo el acceso a mejores oportunidades laborales y condiciones socioculturales para la población.
A lo largo de este artículo estaremos abordando diferentes factores que han hecho a la educación un elemento esencial en el desarrollo de la sociedad, si quieres aprender más sobre este tema, te sugerimos continuar con esta lectura, donde profundizaremos sobre conceptos relevantes como los derechos humanos, el derecho a la educación, el acceso a la educación, la educación social y la importancia de las políticas en educación.
En la actualidad, la educación se ha venido considerando como un bien social que aporta al desarrollo personal de los ciudadanos, así como al desarrollo social, económico y cultural del mundo. Las sociedades más avanzadas son el ejemplo vivo de que fortalecer la adquisición de conocimientos es clave para construir países más productivos y competitivos.
Según datos entregados por la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos OCDE, un año de escolaridad adicional aumenta el PIB per cápita de un país entre un 4 y 7%, corroborando la clara relación que hoy existe entre el nivel de desarrollo de una sociedad y la fortaleza de su sistema educativo.
No queda duda, entonces, que la sociedad y la educación se necesitan la una a la otra para propiciar sociedades más justas, productivas y equitativas. Sin embargo, aunque la demanda de educación ha venido aumentando en los últimos años, los estados y gobiernos de muchos países se han quedado cortos en la respuesta institucional que permita garantizar a las personas el derecho a la educación, de ahí que se aúnen esfuerzos en desarrollar e implementar políticas en educación enfocadas en el desarrollo sociocultural y económico de las poblaciones.
Los derechos humanos son lo que conocemos como el grupo de normas que reconocen y protegen la dignidad humana, permitiendo a las personas alcanzar su autorrealización, a través de libertades, facultades e instituciones relacionadas con bienes primarios o básicos para garantizar una vida digna y la satisfacción de necesidades.
Los derechos humanos, entonces, son los encargados de determinar la forma en que las personas viven y se relacionan en la sociedad, cómo se vinculan con el Estado y las obligaciones que éste tiene con ellas.
En ese orden de ideas, los gobiernos deben trabajar por garantizar que todos aquellos que hacen parte de la sociedad cuenten con los derechos básicos y naturales que les permitan desarrollarse como individuos y como parte de una sociedad.
Dentro de los derechos humanos encontramos incluidos el derecho a la vida y a la libertad, a no estar sometido a la esclavitud ni a torturas, a la libertad de opinión y de expresión, al trabajo y, al que es de mayor interés para este artículo, el derecho a la educación, entre otros.
El derecho a la educación, particularmente, se caracteriza por ser un derecho indispensable para el ejercicio de otros derechos humanos. Su impacto en la sociedad permite sacar a hombres y mujeres de la pobreza, superando desigualdades y garantizando un desarrollo sostenible.
El derecho a la educación incluye aspectos como:
Si bien, aunque el derecho a la educación busca que todos los seres humanos tengan garantizado el acceso a la educación de calidad y sin distinción de género, origen, religión, idioma o cualquier otra condición, la realidad es que más de 240 millones de niños y jóvenes en todo el mundo continúan sin la oportunidad de recibir educación por razones sociales, económica y/o culturales.
El acceso a la educación hacer referencia a la igualdad de oportunidades educativas que todo niño, niña, joven y/o adulto debe tener. Esto implica aspectos como la matriculación oportuna, la progresión o avance escolar a la edad establecida, la asistencia a la escuela, el aprendizaje según la normativa de rendimiento escolar determinada, entornos de aprendizaje seguros y distribución equitativa de material educativo.
Para que exista y aumente progresivamente el acceso a la educación se hace indispensable que los gobiernos se comprometan con el desarrollo de políticas en educación que garanticen su calidad y cuerpos docentes altamente capacitados, así como la inclusión de población migrante o excluidos.
En este sentido, la Relatora Especial de la Organización de las Naciones Unidas ONU sobre el derecho a la educación, Katarina Tomasevski, desarrolló cuatro dimensiones denominadas las 4-A o 4 Aes, las cuales señalan qué características debe incluir la educación para ser un derecho significativo:
Las 4 Aes definidas por Tomasevski pueden considerarse como un punto de partida para los estados y gobiernos en su tarea de garantizar el acceso al derecho a la educación, un proceso que está rodeado de obligaciones y responsabilidades a las cuales se debe atender mediante el diseño e implementación de políticas en educación que permitan ajustar y preparar los sistemas educativos para las demandas del futuro.
A lo largo de este artículo hemos podido evidenciar el impacto de la educación en la sociedad, entendiendo que la educación es un derecho humano fundamental capaz de transformar a los individuos de una sociedad, propiciando su desarrollo no solo intelectual, sino también económico y cultural.
La relevancia de la educación en la sociedad y la imperativa necesidad de aumentar el acceso a la misma, obliga a los gobiernos a involucrarse y ocuparse de la creación de estrategias y políticas en educación orientadas a garantizar formación de calidad para todos los ciudadanos del mundo.
Las políticas en educación se entienden como el conjunto de herramientas que son implementadas por los gobiernos para intervenir y optimizar las prácticas educativas y el proceso y distribución de los conocimientos en una sociedad.
De esta forma, los gobiernos deben tener como prioridad en sus agendas el planteamiento e implementación de políticas en educación, ya que éstas se convierten en un punto fundamental dentro de la construcción de sociedades sin brechas sociales y promueven el desarrollo de los países desde una visión próspera, activa, dinámica y transformadora.
Los estados que han ratificado la garantía del derecho a la educación se ven obligados a respetar, proteger y cumplir este derecho, así como a atender las obligaciones inmediatas y progresivas relacionadas con este.
Obligación de respetar, proteger y cumplir:
La importancia, entonces, de las políticas en la educación radica en el compromiso de los gobiernos por aportar en el desarrollo de las sociedades y cómo desde políticas educativas integrales logran abordar y suplir las necesidades básicas de poblaciones rurales y urbanas de una sociedad.
La educación social es considerada una disciplina pedagógica de educación no-formal que tiene como objetivo implementar estrategias y contenidos educativos orientados en la generación de bienestar social y la mejoría de la calidad de vida de las personas.
Esta disciplina se centra en la Declaración Universal de los Derechos Humanos de la ONU y se enfoca en la integración de las personas a la educación desde la diversidad de las redes sociales, desde una perspectiva de desarrollo de la sociabilidad y circulación social.
La educación social cumple una serie de funciones que permiten apoyar, de manera indirecta, las políticas en educación de los estados y gobiernos, entre ellas se encuentran:
La sociedad y la educación, como hemos visto a lo largo de este artículo, siempre han mantenido una relación estrecha que, junto a las políticas en educación, buscan que las personas logren su autorrealización, procurando el desarrollo de capacidades esenciales para el crecimiento personal, social, económico y cultural.
Si estás interesado en profundizar, dominar e implementar conceptos como el acceso y derecho a la educación y la educación social, con el objetivo de aportar en la construcción de sociedades más desarrolladas y prósperas, tenemos una opción ideal para ti.
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