Claves para responder preguntas y destacar en una entrevista de trabajo

Las entrevistas laborales suelen ser uno de los momentos que más estrés y nerviosismo produce en los profesionales cuando se encuentran en el proceso de buscar empleo. Es un escenario crucial donde los reclutadores evalúan y ponen a prueba las capacidades del candidato para determinar si es apto para el cargo al que aspira.

Al pensar en cómo se desarrolla una entrevista de trabajo, una de las primeras cosas que se pueden cruzar por tu cabeza son las preguntas que te realizarán y, más importante aún, cómo responder a ellas.

Enfrentar de manera profesional y exitosa las preguntas en una entrevista laboral es una tarea de mucho cuidado y detalle, por eso es importante que te prepares, investigando y conociendo a fondo la empresa que te evaluará y repasando tu perfil profesional para que puedas afrontar este momento con seguridad y confianza.

Si estás buscando empleo o pronto tendrás tu primera entrevista laboral, continúa leyendo este artículo donde te daremos algunos consejos claves para responder preguntas durante una entrevista de trabajo.

Tipos de preguntas

Durante una entrevista laboral es probable que te enfrentes a diferentes tipos de preguntas que pueden abordar aspectos personales y profesionales. Conocer qué tipo de preguntas son las más comunes te puede dar un plus en el momento de entablar una conversación con el reclutador, ya que podrás expresarte de manera clara, fluida y segura.

A continuación, te presentamos 5 tipos de preguntas que pueden realizarte en una entrevista de trabajo:

1. Preguntas de tipo personal: los reclutadores suelen usar este tipo de preguntas para iniciar las entrevistas. Son ideales para romper el hielo y conocer detalles sobre la personalidad, intereses y motivaciones del candidato. Algunas de estas preguntas podrían ser: háblame de ti, ¿quién eres?, ¿cómo te definirías?, ¿cuáles son tus fortalezas y debilidades?, ¿tienes pasatiempos?
   
   
2. Preguntas sobre formación académica: el objetivo de estas preguntas es conocer a profundidad tus estudios, más que fechas o instituciones, los reclutadores les interesa saber en qué áreas y conocimientos eres profesional o te has especializado. Podrás encontrarte con preguntas cómo: ¿qué has estudiado y por qué?, ¿has realizado cursos o diplomados?, ¿tienes alguna especialización o maestría?
   
   
3. Preguntas sobre tu curriculum y experiencia laboral: este tipo de preguntas suelen tener diferentes objetivos que pueden estar enfocados en comprobar, clarificar o ampliar detalles sobre tu información curricular. También son usadas para verificar si has tenido experiencias en cargos similares y cómo ha sido tu crecimiento y desarrollo profesional. Por lo general te preguntarán sobre: ¿cuál es tu experiencia laboral?, ¿dónde has trabajado antes?, ¿por qué dejaste tu último trabajo?, ¿cómo fue tu experiencia en tu anterior trabajo?, si llevas meses sin trabajar podrían querer saber qué has hecho en ese tiempo.
   
   
4. Preguntas sobre el cargo y la empresa: para afrontar este tipo de preguntas es indispensable que tengas una preparación previa, investigando e informándote sobre la empresa y las funciones del cargo al que aspiras, ya que el objetivo de los reclutadores es medir tu nivel de interés por el cargo y qué tanto deseas ser parte de la compañía. Es común que tengas que responder preguntas como: ¿por qué quieres trabajar con nosotros?, ¿qué es lo que más te interesa del cargo?, ¿por qué crees que eres el candidato indicado para nosotros?
   
   
5. Preguntas enfocadas en tus “soft skills” o habilidades blandas: en la actualidad las habilidades inter e intrapersonales vienen tomando fuerza como aspectos de interés para las empresas dentro de sus procesos de selección. El objetivo de estas preguntas no es otro más que conocer tu capacidad para enfrentar situaciones que requieran características relacionadas con el liderazgo, la comunicación, la empatía, el autocontrol y la inteligencia emocional. Algunas de las preguntas que te podrían plantear son: ¿te gusta trabajar en equipo?, ¿cómo sueles afrontar los conflictos laborales?, describe una situación laboral difícil que hayas tenido que enfrentar, ¿has participado en procesos de negociación?
   
   

¿Cómo responder a las preguntas más frecuentes?

Ahora que conoces los diferentes tipos de preguntas y sus objetivos, es momento que amplies tus recursos para que puedas responder de manera exitosa las preguntas más frecuentes en las entrevistas de trabajo.

Prepararte, proyectar y repasar las posibles preguntas y respuestas que darás en una entrevista laboral aumenta tus posibilidades de ser seleccionado para el cargo al que aspiras.

Preguntas personales:

• Háblame de ti, ¿quién eres?, ¿cómo te defines?

Estas preguntas suelen aparecer en el inicio de las entrevistas, son abiertas y suelen propiciar respuestas amplias. Es importante que, en primer lugar, trates de establecer un discurso claro, sustancioso pero concreto, para que no termines extendiéndote más de lo requerido, ya que podrías perder la atención e interés del reclutador.

Por otro lado, esta es la oportunidad que tienes para impactar con tu primera intervención. Realiza un trabajo previo de autoanálisis a nivel personal y profesional para que identifiques esos aspectos que te conviene resaltar, prepara tu discurso enfocado en “venderte” como el candidato ideal, destacando las habilidades, cualidades y experiencias que te hacen apto e idóneo para el cargo.

• ¿Cuáles son tus fortalezas y debilidades?

Con esta pregunta los reclutadores buscan saber cómo te ves a ti mismo, el reconocimiento de aspectos de alto valor, la capacidad de autocrítica y mejora continua.

La clave para responder estas preguntas está en ser sincero, claro y no enfocarte demasiado ni en lo positivo, ni en lo negativo. Es decir, para hablar de tus fortalezas señala con mesura aquello en lo que tienes destreza y cómo aporta eso a tu entorno de trabajo, evita adularte, ya que podrías verte como una persona egocéntrica.

En el caso de tus debilidades, reorienta el enfoque de la pregunta, planteando tus puntos débiles como oportunidades de mejora, reconociendo cómo te ha afectado, cuándo o cómo lo identificaste y qué acciones o estrategias has implementado para mejorar.

• ¿Tienes “hobbies” o pasatiempos?

Este tipo de pregunta pretende profundizar en tus intereses y motivaciones, lo ideal es responder de manera natural, autentica y sincera. Desde luego, es importante ser precavido con lo que mencionas, intenta que los pasatiempos que describas aporten de alguna manera a tu perfil personal o profesional, aunque parece una pregunta inofensiva, recuerda que cualquier dato cuenta y se relaciona con los aspectos que evalúa el reclutador.

Preguntas de formación académica:

• ¿Qué has estudiado y por qué?

A través de esta pregunta los reclutadores buscan conocer cómo ha sido tu trayectoria académica (carreras virtuales, maestrias, carreras presenciales, proyectos propios) Aprovecha esta oportunidad para hablar de las razones para elegir la carrera que realizaste, tu pasión y vocación por tu profesión y todo lo que has aprendido a lo largo de tu camino educativo.

Analiza y reflexiona sobre aquellas experiencias que quizá no han sido positivas, recuerda siempre darles un enfoque hacia la mejora y el aprendizaje. Por ejemplo, si has cambiado de carrera o posees estudios sin terminar, puedes hablar de cómo esa elección te permitió reconocer tus talentos y cualidades para elegir una opción diferente.

• ¿Has realizado cursos o diplomados?, ¿tienes alguna especialización o maestría?

Esta pregunta es una extensión de la anteriormente mencionada, su objetivo es evaluar tu interés en la educación continua y la actualización de conocimientos.

Si tienes estudios adicionales o especializaciones, cuéntale al reclutador cuál fue tu objetivo al realizarlos y cuál es tu proyección laboral con ellos. Si, por el contrario, aún no tienes alguna actualización, puedes mencionar que es una de tus metas a corto o mediano plazo, lo ideal es mostrar tu interés por seguir creciendo profesionalmente.

Preguntas acerca de tu curriculum y experiencia laboral:

• ¿Cuál es tu experiencia laboral?, ¿dónde has trabajado antes?

Enfoca tu respuesta a estas preguntas priorizando la sinceridad, hablando de manera amplia sobre cuáles han sido tus experiencias laborales, qué has logrado aprender y cómo han aportado a tu desarrollo profesional y personal.

En el caso de que no cuentes con experiencia laboral, te sugerimos resaltar tus experiencias académicas, es decir pasantías, voluntariados o proyectos universitarios donde hayas podido poner a prueba tus conocimientos y aptitudes.

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• ¿Por qué dejaste tu último trabajo?, ¿cómo fue tu experiencia en tu anterior trabajo?

Para este tipo de preguntas reiteramos nuestra sugerencia de enfocar tu respuesta hacia aspectos positivos, eso sí siendo lo más honesto posible.

Puedes orientar tus argumentos hacia la necesidad de encontrar nuevas oportunidades de crecimiento laboral o un espacio que te rete como profesional. Destaca siempre, e independientemente de las razones por las que dejaste tu anterior empleo, los aprendizajes obtenidos.

*Consejo adicional: no critiques ni hables mal de tu anterior lugar de trabajo, jefes o compañeros, esto puede generarte una imagen de desconfianza y poca lealtad.

• ¿Qué has hecho durante el tiempo que has estado sin empleo?

Si llevas varios meses sin trabajar, los reclutadores podrían interesarse en saber qué has hecho en ese tiempo, es importante que puedas destacar que, aunque no has tenido la oportunidad de ubicarte laboralmente, te has enfocado en potenciar tu formación y actualización personal y profesional.

Estas preguntas buscan conocer cómo enfrentas este tipo de situaciones y cuál es tu interés por encontrar soluciones o alternativas que te permitan continuar creciendo y avanzando.

Preguntas sobre el cargo y la empresa:

• ¿Por qué quieres trabajar con nosotros?, ¿qué es lo que más te interesa del cargo?, ¿por qué crees que eres el candidato indicado para nosotros?

Estas preguntas son clave para que logres generar respuestas de valor y obtengas puntos a favor con los reclutadores, ya que a través de ellas medirán el nivel de interés que tienes en vincularte con la compañía.

Investiga e infórmate sobre la empresa y las funciones del cargo ofertado, cuando te pregunten acerca de tus razones para querer trabajar en la organización procura enfocar tus respuestas hacia la cultura, los valores y la misión y visión corporativa, así como destacar las habilidades y conocimientos que te hacen apto para el cargo, esto te ayudará a conectar de manera positiva con tu entrevistador y te hará destacar.

Preguntas enfocadas en tus habilidades blandas:

• ¿Te gusta trabajar en equipo?, ¿cómo sueles afrontar los conflictos laborales?, ¿has participado en procesos de negociación?

Es importante que en estas preguntas puedas destacar tus habilidades interpersonales e intrapersonales, es decir como logras aplicar aspectos como el liderazgo, la asertividad, el diálogo, la paciencia, la empatía y la inteligencia emocional en las diferentes situaciones que se pueden presentar en el entorno laboral.

Te aconsejamos nutrir tus respuestas con ejemplos de experiencias que hayas tenido en trabajos o proyectos anteriores, esto te permitirá respaldar tus habilidades blandas frente a los reclutadores.

Destaca haciendo preguntas de interés

Si bien es cierto que en una entrevista de trabajo la dinámica se basa, en su mayoría, en que te realicen preguntas, también es válido que seas tú quien las haga, de hecho, es una excelente muestra de interés y te abre la posibilidad de generar cercanía y conocer a fondo la empresa y el cargo al que aspiras.

Estas son algunas preguntas que podrías realizarle a tu entrevistador. Te aconsejamos realizar una investigación previa para que, de alguna manera, estés en contexto y comprendas sus respuestas.

• ¿El cargo ofrecido es nuevo o ya ha sido ocupado antes?
• ¿Cuáles son las funciones y responsabilidades del cargo?
• ¿Cuáles son las expectativas con el candidato que sea elegido?
• ¿A qué área o equipo de trabajo está vinculado el cargo?
• ¿Qué es lo mejor de pertenecer a esta compañía?
• ¿La empresa brinda planes de formación?
• ¿Cuál es el siguiente paso en el proceso de selección?

Es importante que estés atento durante la entrevista, ya que en ocasiones muchas de estas preguntas son resueltas por el reclutador dentro de su discurso. Por lo general es al final de la sesión que tienes la oportunidad de generar tus dudas, evalúa cuáles son pertinentes y, sobre todo, deja que la conversación fluya de manera tranquila y natural, para que tu intervención no sea sienta forzada o demasiado preparada.

Lo que no debes hacer en una entrevista de trabajo

A lo largo de este artículo te hemos contado qué preguntas te pueden realizar en una entrevista laboral, cómo las puedes responder y qué podrías preguntar a tu entrevistador, todas estas herramientas te han mostrado lo que puede brindarte puntos extra, sin embargo, también es importante que conozcas qué es lo que no deberías hacer en una entrevista de trabajo, para que todos tus esfuerzos valgan la pena y no se vean opacados por detalles que fácilmente podrías evitar.

Acciones que debes evitar:

• Interrumpir al entrevistador.
• Tener lenguaje corporal, expresión facial y gestos inadecuados.
• Pedir retroalimentación de tu entrevista.
• Responder con monosílabos (sí, no, no sé).
• Realizar preguntas en momentos no indicados.
• Exagerar o mentir en tus respuestas.

Preguntas que no debes hacer:

• ¿Qué es lo que se hace en esta empresa?
• ¿Tendré días libres?
• ¿Cuándo tendré vacaciones?
• ¿Qué tal son los jefes?
• ¿Puedo cambiar mis horarios?

*Consejo adicional: hay preguntas que son válidas, pero que aconsejamos realizarlas en una segunda entrevista o si eres seleccionado para el cargo, puedes resolverlas antes de materializar tu vinculación con la compañía. Estas son las relacionadas con tu salario, prestaciones de ley, condiciones de trabajo, entre otras.

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